Por : Alejandro Velazquez Salsis.
En años recientes, Hidalgo se ha convertido en el estado que más luchadores exporta a otros países; en esta ocasión toca el turno de Black Fire, quien hará una gira de dos meses en la empresa WXW, de Alemania.
El oriundo de Tulancingo partirá al Viejo Continente durante la primera semana de febrero y regresará en abril, tiempo en el que, advirtió, dejará el nombre de México en alto, entre otros objetivos.
“Este viaje representa un parte aguas, porque la lucha libre mexicana en Europa es muy admirada, sé que gente de otros países va estar ahí, entonces voy a abrir plaza a otros compañeros y ganarme un boleto de regreso”, comentó el gladiador de 24 años de edad.
Sobre la reciente participación que han tenido elementos hidalguenses en el extranjero, principalmente en Japón y Estados Unidos, indicó que históricamente el estado pesa en el deporte, precisamente Tulancingo, debido a representantes como El Santo, Súper Crazy y Crazy Boy, “afortunadamente tengo la dicha de nacer en una cuna de luchadores”
Esta oportunidad en Alemania llega cuando Black Fire cumplió una década en los encorados y su debut se registró en Huayacocotla, Veracruz; aunque a la par de los “costalazos”, también practicó lucha olímpica y fue medallista para Hidalgo en varias Olimpiadas Nacionales, en las que participó de 2003 a 2011.
En cuanto a sus mentores, indicó que en la lucha libre trabajó bajo el mando de Crazy Boy y Sangre Guerrera, aunque también destacó consejos de Súper Crazy, así como del entrenador cubano Francisco Pérez Fals en la parte olímpica.
inalmente, otro de los objetivos que tiene Black Fire en el deporte es nutrir a las nuevas generaciones, ya que cuenta con una carrera en entrenamiento deporte, con especialidad en lucha olímpica, “ahora lo que yo he aprendido trató de trasmitírselo”.